Siempre me ha gustado dedicar algunos minutos, e incluso horas de la noche, a estudiar. Y no me refiero al estudio obligatorio. Me refiero a ese estudio caprichoso. Me refiero a aquello que queremos saber, sin que a ello nos obligue una necesidad. Ahora tenemos, tengo, un medio inmejorable para ello. Ahora tengo un ordenador conectado a internet, o que se conecta a internet, que no sabría exactamente como expresarlo literalmente. Pero sea como sea, lo cierto es que tengo, tenemos, un medio a nuestro alcance que nos incita a ese trabajo no obligado, de investigar, estudiar, averiguar, conocer, querer saber, comprobar, y... un sin fin de cosas, que con solo teclear unas letras y confirmar pulsando otra, nos da en pantalla unos resultados que suelen satisfacer nuestra curiosidad.
Y una vez en ello, ponemos en marcha nuestra imaginación y fabricamos un ficticio o real estudio, sobre aquello que durante años hemos tenido como una incógnita. Y le damos forma y lo amañamos a nuestra manera si queremos. Claro que también lo podemos diseñar de muy distintas formas, todo depende del interés que tengamos en el tema en cuestión. Personalmente son varios los temas en los que invierto horas nocturnas de mi vida diaria. Y estoy adquiriendo unos conocimientos en determinadas materias, que antes me apasionaban sin conocerlas. Y ahora que las conozco, no solo me entusiasman, ahora despiertan mas interés en mí, porque puedo comprobar cuando indago en los distintos temas, la profundidad a la que se puede llegar.
Tengo que agradecer al Progreso y a la Ciencia, que cuando mi vida alcanza los sesenta años de existencia, ponga en mis manos este invento, que aunque no es nuevo, si lo pone al mi alcance muy avanzado ya.
Esta noche voy a seguir con un caprichoso estudio. Voy a seguir con lo que una buena madrugada descubrí navegando, mientras sentado en mi despacho me perdía por los mares de internet. Esta madrugada en mi singladura internauta avanzaré algunas millas más y le seguiré dando forma a ese estudio, que cada día veo mas completo y que cuando lo considere apto para el conocimiento de los demás, lo insertaré en mi Blog. Porque esto del Blog personal, es otro gran invento que nos permite hacer partícipe a los demás de todo aquello que no queremos guardar para nosotros mismos.
Así que... voy a ponerme manos a la obra y... buenas noche tenga, usted amigo mío.
No hay comentarios:
Publicar un comentario